Pontevedra · Caldas
Etapa 4: de Pontevedra a Caldas de Reis
La cuarta etapa del Camino Portugués, que conecta Pontevedra con Caldas de Reis, es un tramo que destaca por su serenidad y su conexión con la naturaleza. Este recorrido es perfecto para los peregrinos que buscan disfrutar de la tranquilidad de los paisajes rurales gallegos, al tiempo que se acercan a la famosa localidad termal de Caldas de Reis. Con sus ríos, bosques y encantadores pueblos, esta etapa ofrece una experiencia relajante y rejuvenecedora en el Camino de Santiago.
Distancia: 21,1 km
Dificultad: Moderada
Duración: 5-6 horas
La etapa que va de Pontevedra a Caldas de Reis es una caminata ligeramente más larga que las anteriores, pero está llena de belleza natural y cultural. Comenzando en la histórica ciudad de Pontevedra, los peregrinos dejan atrás el ambiente urbano para adentrarse en paisajes rurales y tranquilos, típicos de la Galicia interior.
El Camino Portugués desde Pontevedra comienza cruzando el histórico Puente del Burgo y pronto se adentra en caminos rurales que serpentean entre frondosos bosques y pequeñas aldeas, ofreciendo un contraste revitalizante con el entorno urbano de la ciudad. Este tramo es especialmente agradable por su terreno suave y sombreado, destacando la aldea de Santa María de Alba, un lugar pintoresco con paisajes pastorales y una iglesia románica que invitan a la contemplación.
A medida que los peregrinos se acercan a Caldas de Reis, el río Umia se convierte en un compañero constante, añadiendo serenidad al paisaje. Caldas de Reis, famosa por sus aguas termales utilizadas desde la época romana, es el destino ideal para un descanso reparador, ofreciendo un entorno perfecto para revitalizarse antes de continuar el Camino.
Lugares Destacados en la Ruta:
Puente del Burgo: Un puente histórico que marca la salida de Pontevedra y el comienzo de esta etapa, uniendo la historia con el camino por recorrer.
Santa María de Alba: Esta pequeña aldea ofrece un entorno tranquilo y paisajes pastorales, con una iglesia románica que merece una parada para la contemplación.
Río Umia: A medida que te acercas a Caldas de Reis, el río Umia se convierte en un compañero constante, añadiendo serenidad al final de la etapa. No te pierdas la cascada del Río Barosa
La etapa culmina en Caldas de Reis, una encantadora localidad conocida por sus aguas termales, que han sido un lugar de descanso y rejuvenecimiento desde tiempos antiguos. Caldas de Reis no solo ofrece alivio para los pies cansados de los peregrinos, sino también una rica historia y cultura local.
Sus balnearios y fuentes termales son perfectos para relajar el cuerpo antes de continuar el Camino. Además, su entorno natural, con parques y jardines a orillas del río Umia, proporciona un ambiente de paz y serenidad ideal para reflexionar sobre la jornada.
Estamos en Compostela
XG - 978 · Arribadas 11
15706 · Santiago de Compostela